Fuente: Yo aprendo (Chile).
Conclusiones
"Los problemas para interpretar gestos y ademanes o para adaptar el tono de voz al mensaje que se quiere transmitir, la torpeza en el control postural o las dificultades para integrar la información en un todo coherente y significativo obstaculizan de manera significativa la fluidez, reciprocidad y dinamismo que caracteriza a las relaciones interpersonales, no son antipáticos o maleducados, sencillamente tienen una manera diferente de entender el mundo"
Tags: Adolescentes
Posted 26 Apr 2013 by admin in Asperger, Educar en casa, Enseñar en casa, Padres educadores,Psicopedagogía
Posted 26 Apr 2013 by admin in Asperger, Educar en casa, Enseñar en casa, Padres educadores,Psicopedagogía
Muchas de las características
definitorias del SA se hacen más complejas al llegar a la adolescencia. Además,
el panorama se complica si tenemos en cuenta que algunas de las dificultades de
estas personas son más fáciles de manejar en la infancia.
Las últimas
investigaciones han demostrado que a partir de la adolescencia el riesgo de
padecer alteraciones psicológicas como depresión, ansiedad u obsesiones aumenta notablemente en las personas
con Síndrome de Asperger. Para ellas, la adolescencia es una época especialmente
difícil, ya que en ese momento experimentan un mayor deseo de relación y
necesidad de formar parte de un grupo, junto con una clara conciencia de las
diferencias entre ellos y los otros chicos de su edad.
Durante este periodo, los
chicos y chicas con Síndrome de Asperger se pueden mostrar excesivamente
sensibles a las críticas y a las burlas de sus compañeros. Aunque los cambios
físicos se producen a la misma edad que en el resto de los adolescentes, los
cambios emocionales suelen mostrar cierto retraso; así, mientras que sus
compañeros ya hablan de novias o de saltarse las reglas, ellos continúan
queriendo sólo una amistad y muestran fuertes valores morales.
A pesar de ello, la
adolescencia también trae consigo una mayor comprensión de las distintas
situaciones sociales, mayor capacidad de reflexionar sobre distintos eventos y
sobre uno mismo y mayor motivación hacia el aprendizaje y la superación de las
propias limitaciones. En esta nueva etapa del ciclo vital el adolescente
continúa presentando las mayores dificultades en las áreas de relación social,
comunicación, flexibilidad y coordinación motora.
En el Síndrome de Asperger
vemos que la adolescencia trae consigo:
§
Mayor tendencia a la soledad
§
Incomprensión
§
Depresión
§
Ansiedad
§
Retraso en cambios emocionales
§
Deseo frustrado de pertenecer a
un grupo
§
Presencia de inmadurez en el
plano emocional.
§
Presencia de reacciones
emocionales desproporcionadas y poco ajustadas a la situación.
§
Intereses inmaduros y poco
acordes con la edad (por ejemplo determinados dibujos animados, personajes de
programas infantiles, etc.).
§
Mayor conciencia de diferencia
y de soledad
§
Mayor vulnerabilidad a
alteraciones psicológicas como la depresión, la ansiedad y el estrés.
§
Descuido de la higiene y el
cuidado personal.
§
Aumento de las obsesiones y los
rituales de pensamiento
§
Dificultades académicas. El
rendimiento escolar en los cursos superiores se ve dificultado por:
1.
La lentitud al coger apuntes.
2.
Las dificultades para adaptarse a los frecuentes cambios de
profesores, aulas, horarios, etc.
3.
Torpeza a la hora de elaborar planes de estudios y secuenciar
sus tareas.
4.
Desmotivación hacia determinadas asignaturas.
5.
Dificultades para captar la idea principal de un texto y para
seleccionar la información más relevante.
¿Que marca la diferencia?
§
Presencia de fuertes valores
morales: Los adolescentes con SA suelen mostrar altos valores de lealtad,
sinceridad, compañerismo y bondad, lo que les convierte en personas
excepcionales y honestas, defensores de los derechos humanos y fuertes críticos
de las injusticias que observan a su alrededor
§
Persistencia para alcanzar sus
metas y objetivos.
§
Gran deseo de superación.
§
Personalidad sencilla, ingenua
y “transparente
§
Ausencia de malicia y de
“dobles intenciones
§
Mejor dominio de las reglas
sociales básicas
Necesidades en la adolescencia
En los ciclos de educación
secundaria y superior es importante tener en cuenta una serie de estrategias
útiles que pueden facilitar tanto el éxito académico, como su integración
social en su grupo de referencia, disminuyendo de esta manera el absentismo
escolar, la desmotivación y el malestar que suelen expresar muchos de estos
adolescentes cuando llegan a cursos superiores. Para facilitar la adaptación a
las nuevas exigencias académicas y sociales es aconsejable tener en cuenta las
siguientes orientaciones educativas centradas en el ámbito escolar (Asociación Asperger España (2007) Un acercamiento al
Síndrome de Asperger: una guía teórica y práctica):
§
Educar a los compañeros en el
respeto, tolerancia y comprensión del joven con SA. Integración social
§
Enfatizar habilidades
académicas sobresalientes
§
Motivarlos en actividades que
refuercen su autoestima
§
Adaptar la metodología de la
enseñanza: Proporcionarles adaptaciones no tanto de contenido como de
metodología (más tiempo para terminar sus tareas y exámenes, posibilidad de
exámenes orales, utilización de un ordenador con procesador de texto, potenciar
la vía visual de aprendizaje, empleo de preguntas cerradas en los exámenes como
los test de respuestas múltiples, tiempo extra para pasar a limpio los
escritos, etc.).
§
Asignarles algunas tareas
académicas en las que se puedan incluir sus temas de interés
§
Tener un tutor o profesor de
apoyo
§
Prepararlo para la transición a
la vida adulta
Conclusiones
El adolescente es capaz no
sólo de captar el estado inmediato de las cosas, sino de entender los posibles
estados que éstas podrían asumir. La conciencia de la discrepancia entre lo
real y lo posible, contribuye a convertir al adolescente en un “rebelde”.
Constantemente compara lo posible con lo real y descubre en lo real la multitud
de las fallas latentes. Todo esto lo hace ser crítico y puede ser conflictivo
ante los adultos. La aparición del pensamiento operativo formal
(hipotético-deductivo) afecta también al adolescente en la idea que se forma de
sí mismo. Comienza a dirigir sus nuevas facultades de pensamiento hacia adentro
y se vuelve introspectivo, analítico y autocrítico. El concepto de sí mismo del
adolescente fluctuará entre una enorme sobreestimación, con deseos y fantasías
de ser una persona extraordinaria y por otra parte de un intenso menosprecio
donde duda de sus aptitudes y habilidades al compararse con otros que toma como
modelos a los cuales aspira imitar
Son consideradas como una
de las tareas evolutivas importantes de esta etapa el aprender a percibir,
modular y controlar la expresión de las emociones e impulsos. En la
adolescencia temprana tiende a haber mayor labilidad emocional y descontrol de
impulsos, en la adolescencia media es la etapa en la que los sentimientos
experimentan su mayor intensidad y en la etapa posterior el adolescente irá
experimentando una mayor profundidad y duración de sus sentimientos, así como
irá desarrollando la responsabilidad, lo que implica pasar de sentirse
“víctima” de las circunstancias a sentir un mayor autocontrol.
La etapa de la
adolescencia es un breaking point para
el Síndrome de Asperger, si ya para un adolescente es compleja, para ello es aún
más, ya que estos cambios pueden dar lugar a graves consecuencias como son
trastornos de ansiedad y depresión, su dificultad para ser empático, para
ponerse en “el lugar del otro” hace que las conductas ajenas sean
imprevisibles, carentes de sentido y, en general, imposibles de comprender y
por consiguiente se dificulta esa integración al grupo de pares, tan importante
en la adolescencia pues los ayuda a autoafirmarse e interactuar en un contexto
más cercano a él. Los problemas para interpretar gestos y ademanes o para
adaptar el tono de voz al mensaje que se quiere transmitir, la torpeza en el
control postural o las dificultades para integrar la información en un todo
coherente y significativo obstaculizan de manera significativa la fluidez,
reciprocidad y dinamismo que caracteriza a las relaciones interpersonales, no
son antipáticos o maleducados, sencillamente tienen una manera diferente de
entender el mundo. La intervención en habilidades sociales desde edades
tempranas, la preparación para los cambios físicos y psíquicos de la
adolescencia, pueden ayudar a disminuir algunas de las consecuencias que esta
etapa supone para el SA.